La paciencia de Dios (LAD XIII)

Serie: Dogmática Escritural, Dios y Su Palabra.

Pregunta 35: ¿Cuáles son los Atributos de Dios?

La paciencia de Dios

Cercano a los atributos de Dios sobre Su amor, bondad y misericordia está éste que habla sobre la paciencia de Dios. De hecho, este atributo debe verse como un aspecto u operación de estas virtudes a las cuales Dios nos hace partícipes. Esto lo vemos en Éxodo 34:6-7;

“Y pasando Jehová por delante de él, proclamó: !!Jehová! !!Jehová! fuerte, misericordioso y piadoso; tardo para la ira, y grande en misericordia y verdad; que guarda misericordia a millares, que perdona la iniquidad, la rebelión y el pecado, y que de ningún modo tendrá por inocente al malvado; que visita la iniquidad de los padres sobre los hijos y sobre los hijos de los hijos, hasta la tercera y cuarta generación.”    

Vemos en este pasaje como Dios mismo proclama Su Nombre ante Su siervo Moisés revelando así Su amor, gracia y misericordia. En Números 14:18 leemos también que; “Jehová, [es] tardo para la ira y grande en misericordia, que perdona la iniquidad y la rebelión, aunque de ningún modo tendrá por inocente al culpable; que visita la maldad de los padres sobre los hijos hasta los terceros y hasta los cuartos.” En el Salmo 86:14-17 dice; “Oh Dios, los soberbios se levantaron contra mí, Y conspiración de violentos ha buscado mi vida, Y no te pusieron delante de sí. Mas tú, Señor, Dios misericordioso y clemente, lento para la ira, y grande en misericordia y verdad, Mírame, y ten misericordia de mí; Da tu poder a tu siervo, Y guarda al hijo de tu sierva. Haz conmigo señal para bien, Y véanla los que me aborrecen, y sean avergonzados; Porque tú, Jehová, me ayudaste y me consolaste.” De este modo vemos que la paciencia de Dios se presenta en la Escritura en conexión con Su misericordia y salvación para con los Suyos según Su pacto de gracia (Malaquías 3:17, Salmo 103:13).

Es por esa razón que en la segunda carta del apóstol Pedro, capítulo 3 verso 9 leemos que; “El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.” Este todos en sumamente importante, pues habla de todos aquello representados por Cristo, como leemos en el verso 15; “Y tened entendido que la paciencia de nuestro Señor es para salvación; como también nuestro amado hermano Pablo, según la sabiduría que le ha sido dada, os ha escrito.” Por lo tanto, la paciencia de Dios en conexión a Su misericordia es siempre para salvación, es decir, para aquellos que por gracia y por medio de la fe son partícipes de la vida eterna en Cristo Jesús; “a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados” (Romanos 3:25).

La paciencia de Dios para con los vasos de ira

En cuanto a la paciencia de Dios en relación con Su justicia e ira, también Dios nos revela en Su Palabra que Dios es paciente con los impíos y rebeldes esperando el gran día donde Su justicia e ira será vindicada a favor de Su pueblo.

En Lucas 18:7-8 leemos; “¿Y acaso Dios no hará justicia a sus escogidos, que claman a él día y noche? ¿Se tardará en responderles? Os digo que pronto les hará justicia. Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?” Y Jeremías 15:15 vemos que el profeta en medio de su aflicción por causa de sus enemigos clamó a Dios diciendo; “Tú lo sabes, oh Jehová; acuérdate de mí, y visítame, y véngame de mis enemigos. No me reproches en la prolongación de tu enojo; sabes que por amor de ti sufro afrenta.”  

Según este texto vemos que Jeremías al sufrir la opresión por parte de sus enemigos es debido a la paciencia de Dios que tiene con los impíos y rebeldes. Dios tenía un propósito de santificar al profeta Jeremías por medio de esta aflicción en manos de ellos (vv. 15-21). De ahí que cuando leemos en Lucas 18 que; “¿Acaso Dios no hará justicia a sus escogidos, que claman a él día y noche? ¿Se tardará en responderles?” La respuesta a estas dos preguntas es categórica; “Os digo que pronto les hará justicia.”  

De este modo vemos que Dios es paciente tanto para la conversión de Su pueblo electo en Cristo Jesús como vimos en 2 Pedro 3:9, 15 como también para la santificación de ellos bajo la persecución y opresión en manos de los impíos y rebeldes. Dios es paciente en Su misericordia para con los Suyos como también Dios es paciente y tardo para la ira en Su justicia para con los rebeldes e impíos con miras en santificar a Su pueblo escogido (Deuteronomio 32:35, Nahúm 1:3 Romanos 9:22, 12:19, Hebreos 10:30).

Wilhelmus à Brakel (1635-1711) dice sobre este atributo;

“Tal es el carácter de Dios, como le hemos demostrado ampliamente. Su carácter es Santo, bueno, amoroso, lleno de gracia, misericordioso y paciente.” [1]      

Por último, en la epístola de Santiago 5:7-9 se nos dice; “Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia hasta que reciba la lluvia temprana y la tardía. Tened también vosotros paciencia, y afirmad vuestros corazones; porque la venida del Señor se acerca. Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para que no seáis condenados; he aquí, el juez está delante de la puerta.”


[1] Brakel, Wilhelmus à, The Christian's Reasonable Service, Vol 1 página 126.