Ya que el problema del irracionalismo en la iglesia visible persiste en nuestros tiempos por teólogo contemporáneos, un vistazo a la controversia Clark / Van Til puede ayudarnos a corregir este error de nuestros tiempos. El profesor Herman Hoeksema (HH como abreviación futura) observó y resumió los tres puntos del debate en su libro The Clark-Van Til Controversy, estos tres puntos nos ayudara a identificar el problema actual y evitar ser parte del irracionalismo religioso de nuestra época;
El profesor Herman Hoeksema escribe:
1) Según el Dr. Clark toda verdad, en Dios y en el hombre, es proposicional, es decir, asume la forma de proposiciones (Dios es bueno, el hombre es mortal, dos por dos son cuatro, el todo es mayor que cualquiera de sus partes, etc. . -HH) Los denunciantes contra Clak lo niegan, al menos en lo que respecta al conocimiento de Dios.
2) Dr. Clark sostiene que el conocimiento del hombre de la misma proposición es idéntico con el conocimiento de la misma proposición de Dios. Cualquier proposición tiene el mismo significado para Dios como para el hombre. Cuando se le preguntó a Clark que; ‘¿Usted cree que todo lo que está revelado en la Escritura es para ser comprendido por la mente del hombre?’ a lo cual él respondió; ‘Oh, claro, para eso nos fue dada, para entenderla.’
3) Dr. Clark enseña que el conocimiento de Dios consiste en un número infinito de proposiciones, mientras que sólo un número finito puede ser revelado al hombre. Y esto demuestra que, de acuerdo con él, la diferencia entre el conocimiento de Dios y el conocimiento del hombre es sólo cuantitativamente: Dios simplemente sabe infinitamente más que el hombre. Los denunciantes contra Clark insistieron en que también esta diferencia es cualitativamente, ya que también se refiere a la cuestión de la naturaleza y modo de conocimiento a la nuestra de Dios. [1]
Luego el profesor Herman Hoeksema da en el blanco al concluir:
Sin embargo, incluso ahora uno empieza a preguntarse si la verdadera cuestión en esta controversia (entre Clark / Van Til) no es si Dios, sino si su revelación a nosotros en las Escrituras es comprensible al final, es decir, que ella puede ser entendible lógicamente por la mente del hombre. La posición del Dr. Clark es que toda la Escritura nos fue dada para que podamos entenderla, que toda ella está adaptada a nuestra mente humana de modo que, a pesar de que hay muchas cosas en la revelación de Dios que no podamos sondear, no hay nada en ella que sea contradictoria a la inteligencia humana y a la lógica. Y los opositores del Dr. Clark parecen negar esto.
Y si esto fuera el caso, la cuestión de fondo, si los denunciantes contra el Dr. Clark toman la postura de que la Escritura revela cosas que son, no por encima y más allá, pero contraria y en conflicto con la mente humana, es mi convicción de que los denunciantes deben ser acusados de heterodoxia, y de socavar toda sana teología.
O bien, la lógica de la revelación es nuestra lógica, o no hay revelación alguna. Esta proposición yo estoy dispuesto a defender en cualquier momento. [2]
Carl Henry escribió al respecto sobre “una lógica más alta”:
La insistencia en un abismo lógico entre las concepciones humanas y Dios como el objeto de conocimiento religioso erosiona el conocimiento y no puede escapar de ser reducido al escepticismo. Conceptos que por definición son inadecuados a la verdad de Dios no pueden ser usados para compensar una deficiencia lógica apelando a la omnipotencia o la gracia de Dios. Tampoco lo hará el llamar a reestructurar la lógica con el fin de conocer a Dios. Quienquiera que busque una lógica más alta debe preservar las leyes de la lógica existentes para escapar de la defensa de una causa de sinsentidos ilógicos.[3]
Según Gordon Clark la visión bíblica de la lógica es la siguiente:
La Biblia enseña que Dios es Dios de conocimiento (1 Samuel 2: 3; Romanos 16:27). Eternamente omnisciente (Salmo 139: 1-6), Dios no sólo es la fuente de Su propio conocimiento, sino también es la fuente determinante de toda verdad. Lo que es verdad es verdad porque Dios piensa así. Tal como la Confesión de Westminster (1: 4) enseña; Dios “quien es la Verdad en sí mismo.” Y como lo que no es racional no puede ser verdad (1 Timoteo 6:20), se sigue que Dios debe ser racional. Las leyes de la lógica son la forma en que ÉL piensa. [4]
El profesor Ron Hanko agregaría al respecto:
La lógica es simplemente pensar correctamente y las reglas de la lógica son las reglas para pensar correctamente. Si tenemos esto en nuestra mente no pensaremos despectivamente de la lógica. Seguramente Dios quiere que pensemos bien de Él, de lo correcto e lo incorrecto, y acerca de todas las cosas. Y por la misma razón, debe ser pecado de pensar mal acerca de Dios, acerca de su verdad o acerca de la moral. Decir que lo bueno es malo y que lo malo es bueno es un asunto de un pensamiento equivocado y pecaminoso (Isaías 5:20). El pensamiento correcto, por lo menos acerca de las cosas de Dios, no sólo es correcto, es lo que se exige de nosotros y todo mal pensamiento es condenado (Sal. 50:21, Fil 4:8).
Pensar correctamente, entonces, es pensar en armonía con todo lo que la Palabra enseña. Tenemos que pensar lo que Dios piensa. Tenemos Sus pensamientos en la Palabra. Y así, al igual que en la confesión decimos lo que Él dice, en el pensamiento pensamos lo que Él revela – Sus propios pensamientos (Salmo 10:4). Debemos, por lo tanto, llevar “cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo” (2 Cor 10:5).
Tal pensamiento correcto, sin embargo, es racional y tiene sentido. Pensar correctamente no es sólo pensar lo que se basa en la Palabra de Dios, sino que pensar en lo que es, por lo tanto, inteligible y racional. Precisamente porque los “pensamientos” de la Palabra son la revelación de Dios no son irracionales ni sin sentido, contradictorias ni imposibles de entender. [5]
Por lo tanto, quienes apelan al perspectivismo o al escepticismo descartando así la Revelación de Dios en Su Palabra escrita, lo que ellos olvidan es que no están diciendo algo meramente acerca de nuestra capacidad de entender las cosas; sino más bien, ellos están diciendo algo acerca de Dios. Por lo menos están diciendo que Dios no sabe cómo aclarar las cosas para nosotros en Su Palabra escrita, así que Él habla en evidentes contradicciones o en una lógica diferente para que nosotros podamos entender solo una posibilidad de la verdad, mas no la verdad en sí que quiso revelar, esto nos conduce a un irracionalismo religioso al final que como iglesia de Cristo debemos rechazar.
[1] The Clark-Van Til Controversy, Herman Hoeksema paginas 18-19. [2] The Clark-Van Til Controversy, Herman Hoeksema pagina 20. [3] Cited in Nash, The Word of God and the Mind of Man, 95. [4] La visión bíblica de la lógica por W. Gary Crampton (Link) [5] La Lógica y la Escritura Rev. Ron Hanko (Link)