La Omnitemporalidad de Dios: definición de tiempo

Por Joel R. Parkinson

Hablando generalmente, una de las deficiencias que enfrentan muchas de las posiciones en ambos lados en el debate histórico de este tema ha sido un fallo de definir “tiempo” adecuadamente.  Ha habido varios estudios bíblicos del tiempo, pero estos con frecuencia se reducen a un estudio bíblico de la historia. Así que, exactamente ¿Qué es el “tiempo”?

Comentando sobre Agustín, Gordon H. Clark escribió;

“La ciudad de Dios dice, ‘Porque si la eternidad y el tiempo son correctamente distinguidos, el tiempo nunca llega a ser existente sin movimiento, y la eternidad admite ningún cambio, ¿Quién no vería que el tiempo no podría tener existencia si antes alguna criatura variable había llegado a la existencia?’ (XI, vi).

Esto significa que no podía haber habido ningún tiempo antes de la creación del mundo. También significa que la eternidad es diferente del tiempo porque “el tiempo es una función del cambio, y Dios es inmutable.” [2]. A lo largo de estas líneas, podemos decir que; “El tiempo es el medio en el que se produce el cambio.” Esta es la mejor definición que he encontrado de “tiempo.”

Para estar seguros, “El tiempo es el medio en el que se produce el cambio.” aparenta ser más bien un descriptivo y una definición trabajable en lugar de una definición esencial de lo que es tiempo. A primera vista no nos dice cuál es la esencia o composición del tiempo. Tampoco es elegante y noble como algunos filósofos o poetas les gustaría. Sin embargo, esta definición más bien prosaica nos pone en el corazón de lo que implica el tiempo, y tiene varias ventajas a favor.

Por ejemplo:

  1. El cambio es cómo décimo el tiempo.
    Relojes, calendarios y circunstancias todas marcan tiempo por el avance de las manecillas o los dígitos, la salida o puesta del sol, la progresión de las estaciones, u otros cambios.
  2. El cambio es la forma en que percibimos el tiempo.
    “El tiempo vuela cuando uno se divierte.”
    Los eventos de ritmo rápido parecen acelerar el tiempo porque hay una gran cantidad de cambios. “Una mirada a un olla con agua caliente parece nunca hervir”. Algo lento o  con ninguna acción parece hacer que el tiempo vaya más lento o se detenga porque hay poco cambio.
  3. El cambio es cómo juzgamos la edad de una persona.
    En una escuela secundaria la gente se mira más jóven si no ha cambiado mucho. Por el contrario, la gente se mira más vieja si han adquirido kilos de más, arrugas o con la perdida del cabello. “No has cambiado nada” normalmente significa, “No te miras tan viejo.”
  4. El cambio es esencial al tiempo.
    En las historias de ciencia ficción y programas de televisión como “The Twilight Zone “, “detener el tiempo” se concibe como que nada cambia. En estas historias fantasiosas alguien podría ser no afectado y aun así ser capaz de actuar mientras que todo el mundo y todo lo demás está congelado en el tiempo. Con todo, para él no se ha detenido el tiempo. De hecho, si el tiempo nunca se hubiera detenido nadie lo hubiese sabido porque nada hubiese cambiado.
  5. El cambio es consistente con los conceptos bíblicos de tiempo.
    “Y fue la tarde y la mañana el primer día” (Génesis 1: 5). Al comienzo de una unidad de tiempo (un día) se distingue por el cambio (noche y mañana). Un eón (edad), Cronos (tiempo transcurrido-período) y kairos (momento) son todos distinguidos por los cambios de los tiempos anteriores. [3] Por eso, el surgimiento y la caída de reyes marcan diferentes momentos de tiempo en la Biblia al igual que una serie de otros cambios en la historia. Todos estos son cambios del pasado y por consiguiente, dan paso a nuevas épocas de algún otro tipo.

Por lo tanto, “El tiempo es el medio en el que se produce el cambio” parece ser una buena descripción del tiempo. En realidad, nos pone a la esencia del tiempo, la cual no es una sustancia física en sí misma que fluye como el agua. El tiempo no es algo para ser manipulado. El tiempo es una relación entre eventos (cambios) en la historia.

Actualmente, la manera torpe que entendíamos ver el tiempo apuntaba a su carácter fundamental. Algunas de las ideas más fundamentales de la vida son las más difíciles de explicar, ya que son tan básicas e innatas a la imagen de Dios (en el hombre). Los conceptos de Dios [4], la lógica (ley de no contradicción), causa y efecto [5], el bien y el mal, y el tiempo, son muchas veces difíciles de definir precisamente porque todo el mundo ya sabe lo que son. Estas posiblemente ideas innatas –incluyendo el tiempo- son principios organizados en el hombre.


[1] For instance, Oscar Cullmann, Christ and Time: The Primitive Christian Conception of Time and History, Revised Edition, Westminster Press, 1964, and John Marsh, The Fulness of Time, Harper & Brothers, 1952.
[2] Gordon H. Clark, “Time and Eternity,” The Trinity Review, September-October, 1981.
[3] I know that James Barr refutes these rigid definitions of words for time in the Bible (Biblical Words For Time, Alec R. Allenson Inc., 1962, 1969).  I merely mention them here as generalities.  Even if the distinctions between these Greek words are blurred in Biblical usage their essential common dependence on change(s) in history remains.
[4] Presuppositionalists know that one cannot prove the existence of God and that the so-called “theistic proofs” are logically invalid. Proving the existence of God is also irrelevant since awareness of God’s existence is innate to man as the image of God. From the beginning Adam could communicate with God and was responsible to God because he knew God. Adam did not need to learn about God. No one is born an atheist, even after the Fall.
[5] The empiricist David Hume went to great lengths to try to prove that we can have no concept of “cause and effect” from the observation of events (An Inquiry Concerning Human Understanding, Bobbs-Merrill, 1748, 1977, 84-87). However, he failed to admit that men nevertheless do have an idea of what “cause and effect” is. One possibility is that the notion of cause and effect is innate to man as the image of God.  Infants and toddlers apply the concept in an immature way making wrong associations. Yet even the youngest child seems to naturally conclude that one thing is caused by another.

Tomado de The Trinity Foundation
Título en inglés: The Omnitemporality of God

 

photo credit: Jason A. Samfield via photopin cc

0 0 votes
Article Rating

Leave a Reply

1 Comment
Oldest
Newest Most Voted
Inline Feedbacks
View all comments
trackback

[…] a la pregunta inicial debe comenzar con dos preguntas vitales como puntos de partida; (1) La definición de tiempo. (2) La definición de Omnitemporalidad como alternativa a la temporalidad y atemporalidad de Dios. […]