Ayer fuimos muy edificados en el capítulo 13 versos 1-3 del libro de Hebreos.
Particularmente con el verso 1: “Permanezca el amor fraternal.”
Pudimos ver la diferencia del deber de amar conforme a la Ley (que es un deber actual) y el deber de amar con base al nuevo mandamiento de Cristo.
Aquí la diferencias:
– Según la Ley: “No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley.
9 Porque: No adulterarás, no matarás, no hurtarás, no dirás falso testimonio, no codiciarás, y cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.” (Romanos 13:8-9).
– Según el nuevo mandamiento de Cristo: “Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros. En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros.” (Juan 13:34-35).
Esta distinción es muy importante ya que una (según la Ley) es en relación con mi prójimo en general y la segunda (el mandamiento nuevo de Cristo) es en relación al hermano en la fe (cercano o distante).
– La primera protege la dignidad, persona, vida, propiedad y libertad del prójimo en general según la Ley de DIOS.
– La segunda busca vía amor sacrificial tal como nos lo dejó Cristo, atender a las necesidades del hermano en la fe y familia espiritual. Es aquí la fe que obra por amor (Gálatas 5:6).
El apóstol Pablo lo resume de esta forma:
Galatians 5:13 (RV1960)
13 Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros.”
Gracias y paz a todos.