El apóstol Pablo, en su carta a los corintios, brinda una instrucción clara y poderosa que, a menudo, ha sido mal interpretada o mal comprendida. Al aconsejar “portaos varonilmente”, no está haciendo un llamado exclusivo a los hombres, sino instando a todos los creyentes, independientemente de su género, a actuar con valentía y determinación en la fe. A lo largo de las Escrituras, encontramos ejemplos notables de mujeres que personifican este consejo, demostrando valentía y fortaleza en situaciones cruciales. Estas figuras bíblicas son un testimonio vivo de que la fe no discrimina por género y que todos, hombres y mujeres, están llamados a ser valientes en su caminar con Dios. En el siguiente texto, exploraremos a profundidad este consejo y destacaremos cómo, más allá de las palabras, es una invitación a crecer en la fe y a cimentar nuestras vidas en la verdadera libertad que ofrece Cristo.
Pablo instruye a toda una comunidad de creyentes (tanto a hombres como a mujeres) lo siguiente al decir:
“(Hermanos) Velad, estad firmes en la fe; portaos *varonilmente, y esforzaos.” (1 Corintios 16:13).
Sobre la traducción de “portaos varonilmente”, una lectura superficial nos llevaría al error actual de que el texto se refiere a una actividad o rol designada sólo para los hombres cuando en realidad la instrucción del apóstol Pablo es hacia toda la comunidad en general, tanto hombres como mujeres, lo que requiere el hecho de portarse según la fe, es decir, valientes; actuar valerosamente-ἀνδρίζομαι (andrizomai).
Tal fue el caso por ejemplo de;
• Abigail, quien fue una esposa muy valiente en salvar la vida de todos sus trabajadores que estaban a su servicio porque el rey David iba contra ellos por la necedad de su esposo Nabal (1 Samuel 25), o,
• Jocabed, madre de Moisés quien fue una madre muy valiente al salvar a su bebé de las manos del Faraón y quien sería el libertador luego de Israel (Números 26:59; Éxodo 2:1-10), o,
• Rahab quien fue también una prostituta-redimida muy valiente al salvar la vida de los espías hebreos que había enviado Josué a la ciudad de Jericó para conquistarla (Josué 2:1-22) o,
• Débora quien fue una juez-líder-profetiza muy valiente al salvar a Israel del rey Jabín y su opresión constante contra Israel (Jueces 4) o,
• Ester quien fue una reina muy valiente al salvar a los hebreos de las manos de Amán rey de Persia y del odio hacia los judíos.
Todas ellas entre otras mujeres Bíblicas se portaron “varonilmente” y lucharon por sus casas, sus familias o sus pueblos.
El cristianismo es una religión de fuerza; produce héroes. El comentarista Morgan dice que la exhortación significa: “Creced, no seáis niños, no seáis lactantes, sed capaces de estar de pie.”
Por lo tanto, no seamos superficiales con la Palabra de DIOS y tomemos el tiempo de profundizar las Escrituras con el fin de colocar los cimientos propios y necesarios en nuestras vidas y familias; y así discipular a las naciones con la Verdad de DIOS que es Pro Cristo y Su verdadera Libertad.