Serie: Dogmática Escritural, Dios y Su Palabra.
Pregunta 17: ¿Existen supuestas paradojas lógicas en la Escritura?
“pues Dios no es Dios de confusión, sino de paz. Como en todas las iglesias de los santos, ” (1 Corintios 14:33).
Dios no es el autor de confusión. “La irracionalidad es un tipo de caos mental. Descansa sobre una confusión contrapuesta con el Autor de toda verdad que no es un autor de confusión” [1].
RC Sproul en su libro Grandes doctrinas de la Biblia dice en el capítulo 2 lo siguiente sobre el tema;
“El filósofo cristiano Gordon H. Clark en cierta ocasión definió un paradoja como ‘un calambre entre las orejas’. El propósito de su definición era señalar que lo que muchas veces se denomina una paradoja no es nada más que un razonamiento descuidado. Clark, sin embargo, reconoció con claridad la función y el papel legítimo de las paradojas. La palabra paradoja proviene de la raíz griega que significa ‘parecer o aparecer’. Las paradojas [retóricas*] nos resultan difíciles porque a primera vista ‘parecen’ ser contradictorias, pero si las examinamos con mayor detalle podemos encontrarles la solución. Por ejemplo, Jesús dijo que ‘El que halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará’ (Mateo 10:39). Superficialmente, esto parece ser una afirmación del mismo tenor que la que dice que ‘Dios es una mano aplaudiendo’. Parece contener en sí una contradicción. Lo que Jesús intentó decir, sin embargo, fue que si alguien pierde su vida en un sentido, la encontrará en otro sentido. Como la pérdida y el hallazgo están en dos sentidos distintos, no hay ninguna contradicción. Yo soy al mismo tiempo un padre y un hijo pero, obviamente, no en la misma relación” [2].
Vemos en este caso de Mateo 10:39 (como en otros pasajes) que hay un lenguaje retórico en la Escritura que “parece” contradictorio a primera instancia pero que en realidad no lo es. Son solo las paradojas retóricas que parecen ser contradictorias las que en realidad tienen una «solución» al final. No así las paradojas lógicas las cuales son insolubles racionalmente e imposible que procedan de Dios quien es verdad y quien inspiró Su verdad. El alegato de que la Escritura contiene paradojas lógicas procede más bien de una exegesis descuidad y ligera y no de la Palara de Dios per se.
“Nuestras cartas fueron transparentes, y no hay nada escrito entre líneas ni nada que no puedan entender.“ (2 Corintios 1:13).
RC Sproul continúa:
”Nadie es capaz de entender una contradicción porque una contradicción es inherentemente no inteligible. Ni siquiera Dios puede comprender las contradicciones. Pero sin duda que las puede reconocer por lo que en realidad son meras falsedades. La palabra contradicción proviene del latín ‘hablar en contra’. También se las conoce como una antinomia, que significa ‘contra la ley’. Si Dios hablara por medio de contradicciones carecería intelectualmente de leyes, tendría un doble discurso. Es un tremendo insulto y una blasfemia incluso el sugerir que el Autor de la verdad pudiera hablar con contradicciones. La contradicción es la herramienta de aquel que miente, el padre de las mentiras que desprecia la verdad” [3].
Concluyendo nuevamente con la frase de Clark pero ahora en su contexto, vemos ahora mejor a lo que él se refería;
“Las paradojas [retóricas*] son un calambre entre las orejas que puede ser eliminado con un masaje racional” [4].
Base Escritural: (1 Corintios 14:33, Números 23:19, 1 Samuel 2:3, 1 Timoteo 6:20, Juan 1:1, 1 Corintios 2:16).
[1] RC Sproul, "Paradojas, misterios y contradicciones", (Grandes doctrinas Biblicas, pg 7). [2] RC Sproul, "Paradojas, misterios y contradicciones", (Grandes doctrinas Biblicas, pg 8). [3] RC Sproul, "Paradojas, misterios y contradicciones", (Grandes doctrinas Biblicas, pg 9). [4] Gordon H. Clark, "The atonement", pg 32. [*] En las citas, énfasis añadido entre corchetes.